En el 2010 toda España quedó conmocionada cuando se supo que los once ancianos fallecidos durante el último año y medio en el geriátrico La Caritat no habían muerto por enfermedad o causas naturales, como aparecía en sus certificados de defunción. Habían sido asesinados por Joan Vila, también conocido desde entonces como «el Ángel de la Muerte».
El caso levantó de inmediato un revuelo mediático que puso en entredicho algunas de las prácticas del geriátrico, así como el proceder de los médicos a la hora de certificar la muerte de sus pacientes. Pero, sobre todo, planteó una pregunta: ¿por qué Joan Vila, un hombre aparentemente tranquilo, había cometido aquellos terribles crímenes?
Matías Crowder logra con El celador de Olot poner rostro a todas las víctimas de Vila para que, de simples nombres en un formulario, pasen a convertirse en personas. Y consigue también dar respuesta a las muchas preguntas que, a lo largo de una década, se han formulado en torno a su figura: quién es Joan Vila, qué ocurrió para que un día comenzara a asesinar indiscriminadamente a ancianos y, en suma, qué se esconde en la mente del asesino más prolífico del siglo en nuestro país.